"EEUU persiste en error de suponer que nuestro Gobierno le permitiría provocar la desestabilización social en Cuba. Es un derecho y un deber salvaguardar las prerrogativas soberanas y rechazar la injerencia extranjera. Las medidas hostiles anunciadas hoy (por el martes) no alteran esa determinación", escribió el ministro de Exteriores en su cuenta de la red social Twitter.
Según el comunicado del Departamento de Estado estadounidense, entre las nueve personas sancionadas se incluyen miembros de alto rango de los Ministerios del Interior y las Fuerzas Armadas Revolucionarias, sin especificar su identidad.
Por su parte, el secretario de Estado (canciller) de EEUU, Antony Blinken, confirmó que las medidas aplicadas serán restricciones de visas.
"Hoy el Departamento de Estado ha impuesto restricciones de visa a nueve funcionarios del Gobierno cubano penalizando a quienes socavan la capacidad del pueblo cubano para mejorar sus condiciones políticas, económicas y de seguridad. Apoyamos al pueblo cubano en su lucha por las libertades fundamentales", escribió Blinken en Twitter.
El funcionario añadió que la medida se da "a raíz de las acciones del régimen cubano contra manifestantes pacíficos el 15 de noviembre".
La plataforma opositora Archipiélago convocó a una Marcha Cívica por el Cambio para el 15 de noviembre, una protesta que finalmente no se celebró tras ser desautorizada por las autoridades cubanas.
El Gobierno de la isla acusa a Archipiélago de ser una herramienta de EEUU para desestabilizar el país.
Desde la plataforma niegan cualquier relación con Washington y subrayan el carácter pacífico de sus propuestas.
Los recientes intentos de manifestaciones opositoras en la isla han generado una controversial disputa entre La Habana y Washington, donde EEUU acusa al Gobierno cubano de reprimir y encarcelar a los organizadores de las protestas, y Cuba los califica de acciones subversivas y desestabilizadoras organizadas y financiadas desde el país vecino.