El diplomático reconoció que la pregunta sobre la posible entrada de Washington en el formato de Normandía se escucha con mucha frecuencia.
"En un principio no existen barreras que impidan que Washington se una, ya que realmente influye en Kiev, y hay muchas cosas que dependen del enfoque estadounidense de la solución del conflicto ucraniano. En un principio, si EEUU está realmente dispuesto a contribuir, siempre estamos abiertos a que la Casa Blanca ejerza su influencia en Kiev", dijo Krasnitski.
Según el representante de la Cancillería rusa, durante la presidencia de Barack Obama existían canales de negociación con la parte estadounidense que ahora se están reanudando.
"Por lo tanto, ahora es una cuestión de tecnología, ya sea dentro del formato de Normandía o desde fuera, pero siempre se reconoce la importancia de la postura de EEUU con respecto a la solución del problema interno ucraniano, eso no lo puede negar ninguno de los profesionales", agregó el diplomático ruso.
En opinión de Krasnitski, ni Alemania, ni Francia estarían en contra de ampliar el formato de Normandía a costa del ingreso de EEUU.
El 7 de diciembre, se celebró una cumbre virtual entre los presidentes de Rusia y EEUU, Vladímir Putin y Joe Biden, la cual se centró en la crisis ucraniana y la falta de avances en la implementación de los acuerdos de Minsk.
El Cuarteto de Normandía y el Grupo de Contacto Trilateral (Rusia, Ucrania y la OSCE) son las principales plataformas de consultas que buscan resolver el conflicto entre el Gobierno ucraniano y las milicias en el este de Ucrania.
Desde abril de 2014, Ucrania lleva a cabo una operación contra las milicias en Donbás donde se proclamaron las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, en respuesta al violento cambio de Gobierno ocurrido en febrero del mismo año.
Los Acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política al conflicto, pero no han derivado hasta ahora en el cese de la violencia.
Las hostilidades han dejado unos 13.000 muertos, según las estimaciones de la ONU.