Los científicos también prestaron mucha atención a la postura del embrión, exactamente igual a la de los polluelos de las aves modernas.
El feto ha sido bautizado como "bebé Yingliang". Se encontró en rocas de la era cretácica en la zona de Ganzhou, al sur de China.
Por su característico cráneo alargado y sin dientes, los paleontólogos han identificado fácilmente su especie como Oviraptorosaurus, que es un miembro de los dinosaurios terópodos emplumados estrechamente relacionados con las aves modernas.
"Los embriones de dinosaurio son uno de los fósiles más raros, y la mayoría están incompletos", señala un comunicado de prensa. Los autores del estudio añadieron que el hallazgo ayudará a responder muchas preguntas sobre el crecimiento y la reproducción de los dinosaurios.