La sala contencioso-administrativa del tribunal comunicó la autorización de las medidas, que incluyen también la limitación de reuniones a un máximo de 10 personas y la reducción de aforos, por una duración de catorce días.
"Entendemos que resultan idóneas para la lucha contra la propagación del virus, en un entorno por lo demás tan caracterizado por las fechas de Navidad, Fin y Principio de año y Reyes en el que la actitud jovial, aglomeración de personas, asociación a la interacción social, dificultad de mantener a distancia social con mascarilla, etc., puede generar un mayor riesgo de contagio", argumentaron los magistrados.
El confinamiento nocturno, que entrará en vigor el 24 de diciembre, será de 1.00 a 6.00 de la mañana en los municipios con una incidencia superior a los 250 casos por 100.000 habitantes, lo que incluye la ciudad de Barcelona.
Asimismo, todos los encuentros quedarán limitados a 10 personas, lo que afectará a las tradicionales celebraciones de Navidad y las fiestas de Fin de Año.
También se aplicará el cierre del ocio nocturno y la reducción de aforo al 50% en interiores de restaurantes y al 70% en teatros, cines y otras actividades culturales y gimnasios.
El TSJC se pronunció en contra del criterio de la Fiscalía, que consideró que estas acciones eran "muy restrictivas" y no estaban "debidamente motivadas" por parte de las autoridades.
El Gobierno de Cataluña las justifica para tratar de contrarrestar la explosión de contagios de los últimos días, con un récord de 13.000 casos diarios en las últimas 24 horas.
Frente a las duras restricciones que se impondrán en esta región, el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, anunció el 22 de diciembre que a nivel nacional las medidas se limitarán al uso de mascarilla en la calle y el refuerzo de la vacunación.