"Súper tecnología de plástico para indígentes (sic) mentales". Así intentaba el usuario @Blas_de_Lezox, rechazar la validez de los tests de antígenos del virus SARS-CoV-2 que se venden en las farmacias de España para determinar en el ámbito doméstico si una persona está o no infectada de COVID-19.
En su pretensión de refutar la fiabilidad del test y, por ende, del propósito para el que fue creado, este usuario acompañaba su comentario de una fotografía en la que se muestra las dos mitades de la carcasa, en una de las cuales se aloja la tira reactiva. Pero a juzgar por los comentarios que ha merecido el tuit, @Blas_de_Lezox no ha obtenido mucho apoyo a sus creencias.
En tono jocoso y a golpe de ingenio, en ocasiones utilizando la misma foto, la mayoría de los usuarios que tuitearon sus respuestas pone en duda la capacidad mental de este tuitero. "Retarded" o "Eres muy tonto" son algunos de los resultados que arroja el test de antígenos, convenientemente retocado para dar contestación.
Otras respuestas, en tono más serio, explican toda la ciencia que subyace tras la aparente simpleza de la tira reactiva.
También hay quien hace chanza a cuenta de las expectativas del tuitero @Blas_de_Lezox para con el contenido de la prueba de antígenos.
Y asumiendo el margen de error de los tests, otros establecen comparaciones odiosas con la también aparente simplicidad de los métodos anticonceptivos.