Por lo cual en sus cabezas surgen asociaciones distantes de la vida real, y los instó a abstenerse de hacer declaraciones irresponsables.
La titular del Interior del Reino Unido, Priti Patel, declaró anteriormente que "una persona particular", relacionada con el Partido Comunista de China, intentó ejercer influencia sobre parlamentarios británicos.
"China siempre se ha atenido al principio de no injerencia en los asuntos internos de otros Estados, además no tiene la necesidad de hacerlo ni planea dedicarse a la llamada actividad intervencionista. Parece que algunas personas vieron demasiadas películas sobre el agente 007, por lo que en sus cabezas surgen asociaciones inútiles", dijo.
El diplomático calificó como extrema irresponsabilidad la práctica de hacer declaraciones basadas en opiniones subjetivas y conjeturas, que llevan a avivar la tensión.
"Esperamos que las personalidades oficiales de Gran Bretaña se abstengan de hacer declaraciones carentes de todo fundamento y de avivar la teoría de la amenaza china, persiguiendo objetivos políticos enmascarados", agregó.
El periódico Sun informó el 13 de enero que los diputados británicos recibieron del servicio de contraespionaje M15 una notificación sobre amenaza de espionaje chino que parte de una tal Christine Lee, sospechosa de intentar inmiscuirse en la democracia parlamentaria del Reino Unido.
Según ese medio, de momento ningún miembro del Parlamento es sospechoso de haber cometido algún delito y en el centro de la investigación abierta por M15 están las autoridades chinas y sus intentos de hacer daño a Reino Unido.
Lee no fue arrestada, pero su conducta se investiga por los servicios de seguridad. Se supone que ella sigue en el territorio del Reino Unido y dirige una compañía jurídica que tiene oficinas en Londres y Pekín.