"La labor que estamos haciendo sobre China de momento es el trabajo más importante que tenemos", constató Moore en una entrevista con el diario The Economist.
Según Moore, aunque "nuestros intereses y valores son muy distintos de los valores del Gobierno autoritario de China", Londres "necesita cooperar" con Pekín.
Esa cooperación, continuó, incluye el intercambio comercial y muchas importantes cuestiones internacionales, en particular, la lucha contra el cambio climático.
A la vez Moore apuntó las tecnologías son "el campo de batalla" entre el Reino Unido y China, y expresó su apoyo a la política de Londres de restringir el acceso de las empresas chinas a la infraestructura británica.