Durante el ejercicio, los tanquistas a bordo de los vehículos de combate T-72B3 recorrieron una distancia de más de 5 km a través de un terreno boscoso y lleno de nieve.
Los tanques equipados con proyectiles antitanques y un cañón sin retroceso lograron disparar en pleno movimiento contra objetivos de tanques enemigos simulados. Además, las tripulaciones de los tanques practicaron el tiro de flanco sobre un objetivo emergente.
Según el Ministerio de Defensa de Rusia, más de 500 militares y 30 unidades de armamento y equipo militar del distrito militar occidental participaron de este ejercicio en la región rusa de Leningrado.