Un bajo consumo de
agua y la alta ingesta de
frituras, dulces y comida rápida son factores determinantes para que una persona desarrolle una
enfermedad crónica en los riñones, un padecimiento que puede desenvolverse en el organismo de manera silenciosa.
También conocida como insuficiencia renal, en esta enfermedad los riñones van perdiendo su capacidad para filtrar los desechos y el exceso de líquidos de la sangre.
"La mala dieta que llevamos, la obesidad, el sedentarismo, la diabetes mellitus y la hipertensión son los principales generadores del daño renal", explica a Sputnik Andrés Bazán Borges, médico especialista en trasplantes y exjefe del Servicio de Trasplantes del Hospital Juárez de México.
El peligro de esta enfermedad es que las personas que sufren una enfermedad renal crónica acuden al médico cuando el padecimiento ya estaba en una etapa muy avanzada, afirma el experto.
De acuerdo con información de las autoridades de salud del Gobierno de México, los signos y síntomas de la
enfermedad renal crónica se desarrollan con el paso del tiempo y
el daño renal suele avanzar lentamente. La sintomatología incluye náuseas, vómitos, pérdida de apetito, fatiga y debilidad, problemas de sueño, cambios en la producción de orina, disminución de la agudeza mental, espasmos musculares y calambres, hinchazón de pies y presión arterial alta.
En el mundo hay 850 millones de personas con alguna enfermedad renal, según datos de la Sociedad Internacional de Nefrología y la Federación Internacional de Fundaciones del Riñón. La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula, desde 2014 y hasta 2022, que 10% de la población mundial tiene una enfermedad en los riñones, además de que la investigación en torno a estos padecimientos está rezagada.
El experto asegura que existen algunos factores de riesgo que incrementan la probabilidad de desarrollar una enfermedad renal crónica, como
la diabetes, la hipertensión, los problemas cardiovasculares, el tabaquismo y la obesidad.
En algunas zonas de México, como Yucatán, la incidencia para padecer una enfermedad en los riñones es más alta, afirma el especialista del Hospital Juárez.
Esto se debe a que este estado del suroriente del país es rico en
aguas calizas. Por lo tanto, el líquido que se consume allá tiene más
calcio, un elemento que puede provocar la
formación de piedras en los riñones. La
Secretaría de Salud de México recomienda seguir estos ocho puntos para prevenir una
enfermedad renal crónica. De hecho, la insuficiencia renal es un serio problema en este país latinoamericano, donde el 11% de la población —más de 13 millones de personas— padece algún grado de enfermedad en los riñones. De ese total, el 80%, no saben que la padece.