"Por supuesto, si se va en paz, humanamente, entonces existe esa posibilidad. Incluso se puede decir que existe la certeza. Personalmente, tengo que hablar por todas las personas. Y la opinión de todas las personas se tendrá en cuenta en este asunto", dijo Tijanóvskaya en una entrevista al portal LB.ua.
Preguntada si Lukashenko realmente recibiría esas garantías, la opositora comentó que "sí, aún más".
Elaboración de la lista de sanciones
Además, Tijanóvskaya declaró que la oposición bielorrusa tiene previsto elaborar la llamada Lista de Kolésnikova, lista de sanciones bautizada en honor de la opositora María Kolésnikova.
"Creo que todo eso [la lista] será elaborado. Es que tenemos muchísimas cosas para hacer en este momento", dijo Tijanóvskaya en una entrevista concedida al portal LB.ua preguntada acerca de si la oposición bielorrusa tiene planes de instar a la comunidad internacional a crear una lista de sanciones.
"Al principio pensábamos que las autoridades [bielorrusas] verían que el pueblo está en contra, que el pueblo ya no reconoce a [presidente Alexandr] Lukashenko como el líder del país, pensábamos que lo entenderían: ha llegado el momento de oír por fin a su gente y entablar un diálogo, eso es lo que pedimos", explicó Tijanóvskaya.
Añadió que ahora la oposición bielorrusa necesita dar pasos más radicales.
El Comité de Investigación de Bielorrusia informó de que la opositora María Kolésnikova está acusada de realizar llamamientos —a través de internet y otros medios de información— que suponen un atentado a la seguridad nacional de la República de Bielorrusia.
En dicho artículo se estipulan penas de entre dos y cinco años de prisión. Actualmente Kolésnikova permanece bajo custodia.
Bielorrusia es escenario de protestas por los resultados de las elecciones presidenciales del 9 de agosto, que revalidaron un nuevo período para el actual mandatario.
La oposición bielorrusa denunció numerosas irregularidades electorales y por ello exige una repetición de los comicios, opción que Lukashenko ha descartado en términos contundentes.
La oposición formó el Consejo de Coordinación, y en respuesta las autoridades bielorrusas abrieron un expediente penal contra esta organización por un delito tipificado en el artículo 361 del Código Penal, que castiga con penas de hasta cinco años de cárcel los llamamientos a derrocar el poder o cambiar de forma violenta el orden constitucional en el país.
De los siete miembros de la junta directiva del CC solo la Premio Nobel de Literatura Svetlana Alexiévich permanece en libertad en Bielorrusia, mientras los demás están arrestados o se encuentran en el extranjero.