La Cancillería informó que "una de las víctimas fatales era una brasileña de 44 años, madre de tres hijos, residente en Francia" y que el consulado en París está prestando apoyo a la familia.
"El presidente Jair Bolsonaro, en nombre de toda la nación brasileña, presenta sus profundas condolencias a los familiares y amigos de la ciudadana asesinada en Niza, así como a las demás víctimas, y extiende su solidaridad al pueblo y al Gobierno francés", añade la nota.
El Gobierno brasileño también quiso manifestar en especial "su solidaridad con los cristianos y personas de otras confesiones que sufren persecución y violencia debido a sus creencias".
La Cancillería resaltó que Brasil rechaza firmemente cualquier forma de terrorismo, sea cual sea su motivación, y que reafirme su compromiso para combatirlo y erradicarlo, así como para conseguir una mayor libertad de expresión y libertad religiosa en todo el mundo.