"Si es así, me parece una gran ayuda a la paz de Colombia", afirmó al informativo televisivo Noticias Caracol el excomandante guerrillero y ahora presidente del Partido Comunes.
El 23 de noviembre, el portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Ned Price, confirmó que el Gobierno de Joe Biden había iniciado consultas con el Congreso para determinar las "próximas acciones" respecto a la guerrilla colombiana que firmó la paz en 2016.
Esto, después de que los medios de comunicación estadounidenses informaran que la administración de Biden tenía previsto retirar a las FARC de la lista de grupos terroristas extranjeros de país.
El presidente de Colombia, Iván Duque, también reaccionó a esa posibilidad y dijo que aunque no había sido notificado del proceso, era necesario "diferenciar" a los antiguos miembros de esa guerrilla, que dejaron las armas en el marco del acuerdo de paz hace cinco años, de las "disidencias, que son amenazas terroristas que se están enfrentando".
La víspera, su ministro de Defensa, Diego Molano, había calificado la decisión estadounidense, en caso de que se produzca, como "obvia y normal".
"Está claro que las FARC pasaron, en el caso del acuerdo de paz, a ser un partido político, y por supuesto, no puede ser una organización terrorista", dijo el funcionario en declaraciones a periodistas.
El 24 de noviembre se cumplieron cinco años de la firma de la paz entre el Gobierno y la antigua guerrilla más grande de Colombia.