¿Cuáles serán las consecuencias de la crisis energética?
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En tiempos en que todo el mercado energético está experimentando dificultades, es difícil predecir cómo cambiará la situación y quién saldrá ganador. Sin embargo, expertos destacan que Rusia no será el país que enfrentará las duras consecuencias de la crisis actual.
Irina Gaida, directora académica de programas educativos del Centro de Transición Energética y empresa en cuanto a factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo —ESG, por sus siglas en inglés— del Instituto ruso Skólkovo de Ciencia y Tecnología (Skoltech), compartió su pronóstico sobre las consecuencias posibles del cambio de modelo energético en el continente europeo y de los desafíos actuales.
En particular, habló sobre la influencia del techo en los precios del petróleo ruso acordado por la Unión Europea (UE).
"Con la reducción del suministro de gas por el gasoducto ruso al mercado europeo, veremos un interés aún mayor por sustituir las fuentes de energía rusas por el gas natural licuado (GNL). Sin embargo, no hay de dónde sacarlo. (...) Esto significaría tanto la necesidad de medidas de austeridad, que afectarían principalmente a la industria de la UE, como una mayor cooperación con los proveedores de GNL de lugares como EEUU y Catar. Queda por ver hasta qué punto esto se logrará si la UE no está dispuesta a firmar contratos a largo plazo", afirmó Gaida.
En cuanto al gas que ya no se exportará a Europa, Rusia, según la especialista, podrá ampliar las exportaciones a las regiones del mundo en las que continúa el crecimiento económico y el crecimiento del consumo de energía. Sin duda, apuntó, es posible "seguir desarrollando la cooperación con otras regiones, como China".
11 de septiembre 2022, 14:42 GMT
Además, destacó que la inversión de los flujos de exportación rusos hacia el Este fue inevitable, aunque podría hacerse "sin grandes sobresaltos tanto para los productores como para los consumidores".
Agenda verde: ¿quién tiene la mayor ventaja?
Tomando en cuenta el rumbo de Rusia hacia el Este y los países del tercer mundo, donde se concentra el mayor procesamiento de metales de tierras raras, tal situación será beneficiosa para la parte rusa. Pero, aparte de eso, la analista presta atención a otros factores que indican al hecho de que Rusia gana más que otros gracias a la agenda verde:
1.
El gas es uno de los vectores energéticos con menos emisiones de carbono de todos los hidrocarburos y ocupaba un lugar muy destacado en todos los modelos de transición energética antes de las actuales crisis de precios.2.
Rusia es muy fuerte en materia de energía nuclear, que es otra forma de energía con bajas emisiones de carbono y bastante sostenible en muchos frentes, además de las emisiones de gases de efecto invernadero.3.
Rusia, como país con grandes extensiones y abundantes recursos hídricos, es muy apta para desarrollar mecanismos de generación de energía a partir de fuentes alternativas.La introducción del tope a los precios del crudo
El mercado del petróleo, en su opinión, siempre ha sido muy flexible y se adaptó a los cambios y era inevitable que se produjera un cierto declive. Pero, en cualquier caso, "el declive no ha sido tan grande como cabía esperar".
"No hubo una reducción significativa de las exportaciones, hubo una reorientación de los flujos", comentó Gaida, contestando a la pregunta si es realista introducir el tope a los precios del crudo ruso.
Señaló que a diferencia del gas, los productores estadounidenses no están preparados para producir hidrocarburos líquidos a este nivel. Además, la OPEP reitera que está dispuesta a recortar la producción.
"La sustitución completa del petróleo ruso por el de otros proveedores no es posible hoy en día. (...) Hasta que China y la India se unan [a la cartelización de los consumidores], es poco probable que la opinión del resto del mercado sea decisiva", concluyó.
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