América Latina
Desde el Río Bravo hasta Tierra del Fuego, noticias, reportajes y análisis sobre la realidad latinoamericana

Sergio Massa, el político todoterreno encargado de 'salvar' al peronismo en una elección clave

© Foto : © Foto:Twitter Sergio MassaSergio Massa, ministro de Economía argentino
Sergio Massa, ministro de Economía argentino  - Sputnik Mundo, 1920, 06.10.2023
Síguenos en
El candidato carga sobre sus espaldas el desafío de llegar al balotaje en medio de una crisis inflacionaria y un escenario electoral incierto. Sus inicios en la centro-derecha, su ruptura y reconciliación con Cristina Fernández de Kirchner y el salto hasta el Ministerio de Economía: perfil de un profesional de la política con sinuosa trayectoria.
¿Cómo puede un ministro de Economía con 120% de inflación ser competitivo en unas elecciones? La respuesta no radica en el cómo sino en el quién: el instinto y la insaciable vocación de poder de Sergio Massa que lo llevaron a transitar por distintos espacios del espectro ideológico son los que hoy lo convierten en una figura imprescindible para el oficialismo.
El candidato tiene una extensa trayectoria en política. Se formó en un conservadurismo liberal y se sumó después al justicialismo (peronismo). Fue jefe de Gabinete de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015) para convertirse luego en uno de sus máximos detractores y, finalmente, reconciliarse para constituir una pieza clave de la victoria que devolvió el poder al peronismo. Hoy es el candidato presidencial bajo el cual se encolumna todo el dispositivo gobernante.

El domingo 22 de octubre Massa encabezará la boleta de Unión por la Patria. Enfrentará a la coalición opositora de Juntos por el Cambio, con Patricia Bullrich a la cabeza, y al economista libertario Javier Milei, líder de La Libertad Avanza, que dio la sorpresa en las elecciones primarias al superar por estrecho margen a las dos coaliciones tradicionales.

"Lo que destaca a Massa es su olfato. El hilo conductor de su carrera es la vocación de poder y su entendimiento de las lógicas de la política argentina y, en particular, del peronismo: cuando él ve un espacio, lo llena", resume ante Sputnik el analista Sebastián Lacunza.
El repaso de la trayectoria del dirigente deja de manifiesto que estas cualidades constituyen un común denominador en toda su vida política.
Hijo de inmigrantes italianos de clase media, el candidato nació en 1972 en el conurbano bonaerense. Está casado con Malena Galmarini, figura política de segunda línea —actual titular de la empresa pública Aguas y Saneamientos (AySA)— e hija de Fernando Galmarini, histórico dirigente peronista.
Billetes argentinos  - Sputnik Mundo, 1920, 06.10.2023
Economía
Argentina piensa en una moneda digital: ¿propuesta de campaña o solución para la economía?
Massa empezó a militar en su juventud, en la Unión del Centro Democrático (UCeDÉ), partido de inclinación liberal-conservadora. Tras la fusión con el Partido Justicialista (PJ, peronista), el joven aterrizó en el Gobierno neoliberal del entonces presidente Carlos Saúl Menem (1989-1999), designado en una subsecretaría del Ministerio del Interior de la Nación.
En 1999 fue electo diputado de la provincia de Buenos Aires, durante la Gobernación del también peronista Eduardo Duhalde, de peso determinante en el futuro del distrito más rico del país.
Tras el estallido de la crisis económica y política del 2001 —con la sucesión de cinco mandatarios en 11 días—, Duhalde asumió la presidencia (2002-2003) y nombró a Massa en un puesto que resultaría clave para su trayectoria: titular de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES), organismo fundamental en medio del convulsionado escenario social.
Desde esa posición, Massa concentró la gestión del sensible sistema previsional argentino y comenzó a sembrar redes de diálogo con figuras cuya cercanía redundaría en el creciente peso dentro de toda la estructura de la política social nacional.
Tras el mandato duhaldista, un entonces ignoto Néstor Kirchner —gobernador de la provincia sureña de Santa Cruz— fue electo presidente (2003-2007) y decidió mantener a Massa a cargo de la institución, a la luz de su gestión.
"Su paso por la ANSES le dio un perfil definido. Ahí mismo supo dar el salto de la medianía del funcionario de tercera línea hasta la gran vidriera. Su carrera fue incremental: desde esa cartera conoció el país", reflexiona Lacunza.
Con la gestión pública como plataforma, en 2007 Massa decidió volver a la política provincial para disputar la intendencia de Tigre, municipio ubicado en la zona norte del conurbano bonaerense, con el aval del matrimonio Kirchner —Cristina Fernández, esposa del mandatario, iría como candidata a la presidencia—. Massa ganó y, al igual que en la ANSES, optimizó cada milímetro del municipio para ganar peso, esta vez en la provincia más importante del país.
Las redes tejidas surtieron efecto. En 2008, tras la renuncia de Alberto Fernández a la jefatura de Gabinete, tras la crisis política desatada tras el enfrentamiento al sector agropecuario por el alza en los derechos de exportación, la presidenta Cristina Fernández nombró al joven como reemplazante. A los 36 años, Massa aterrizaba en la primera plana de la política nacional.
"Como intendente construyó su capital político en la provincia. No solamente por cuestiones limitadas al municipio, sino a partir de la generación de políticas públicas para acercarse al electorado: Massa es parte de una nueva generación de dirigentes que construye la sucesión del poder manteniendo siempre la influencia", dice a Sputnik el politólogo Facundo Cruz.
Dada su creciente popularidad, en 2009 fue convocado por el matrimonio Kirchner a integrar la lista de candidatos a diputados para la elección de medio término, una instancia clave para el peronismo. Sin embargo, la dura derrota sufrida en la provincia de Buenos Aires motivó al intendente a abandonar la identificación nacional para volver a su municipio, ya decidido a invertir definitivamente en su propia figura. En 2011 fue reelecto en Tigre, aún bajo el paraguas del kirchnerismo.
Sergio Massa - Sputnik Mundo, 1920, 29.08.2023
América Latina
Las medidas económicas de Massa instalan "la idea de que él es quien puede gobernar" Argentina
Desde entonces las diferencias con el espacio comandado por la presidenta —reelecta ese mismo año— se profundizaron hasta que, en las elecciones legislativas del 2013, Massa decidió romper abiertamente con el Gobierno y lanzar su propio espacio, el Frente Renovador, con el que terminaría venciendo al candidato del oficialismo en la provincia de Buenos Aires.
Aliado al Grupo de los Ocho —como se conoció al acuerdo con otros intendentes de la provincia de Buenos Aires— Massa utilizó su victoria como catapulta para proyectarse a nivel nacional de cara a las elecciones presidenciales del 2015. El dirigente soñaba con convertirse en jefe de la oposición: la ruptura con la presidenta parecía definitiva.
No obstante, el exintendente cayó preso de la grieta —como se conoce a la histórica confrontación entre el kirchnerismo y el antikirchnerismo—. La candidatura del renovador terminaría dividiendo al peronismo, y quien capitalizaría aquella disputa sería Mauricio Macri (2015-2019), imponiéndose en el balotaje. El intendente cosechó apenas el 21% de los votos y no logró ingresar a la segunda vuelta.
Durante el Gobierno de la flamante alianza Juntos por el Cambio, Massa se acercó a Macri desde un autoproclamado "peronismo racional", distanciándose del liderado por Cristina Fernández. El lazo fue tan evidente que el mandatario invitó al opositor en su primera participación en el Foro Económico Mundial de Davos, presentándolo como el futuro líder del justicialismo.
El exjefe de Gabinete, que mantenía firme su abierta confrontación con el kirchnerismo, llegó a pronunciar: "Cuando en el 2013 nos querían imponer el 'Cristina eterna' tuvimos el valor de frenarla. Si vuelve a aparecer, vamos a volver a frenarla".
Pero las urnas hablaron y le dieron un duro revés. En las elecciones legislativas del 2017, Massa presentó su candidatura a senador desde el peronismo no kirchnerista y su fuerza terminó tercera, por debajo del triunfante oficialismo y de la fuerza liderada por Fernández. El fundador del Frente Renovador incluso perdió en el municipio de Tigre.
"Tras romper con Kirchner logra meterse de lleno en la disputa nacional. Las elecciones le dieron un claro mensaje en 2017, cuando apenas cosechó el 11% de los votos. En ese momento decide asumir la agenda social, denunciar el endeudamiento externo y las políticas de Macri. Así tuvo una reacción instantánea para cambiar el rumbo", explica Lacunza.
La aplastante victoria del macrismo en los comicios intermedios alimentó la idea de una nueva hegemonía naciente: la propia idea fue una cachetada para un peronismo que debía reaccionar. La frustración que la derrota despertó en Massa alimentó la última travesía del dirigente: su nuevo acercamiento al dispositivo kirchnerista. Hacia 2019, ante unos magros resultados económicos y sociales de la administración Macri, la oposición peronista se hizo carne bajo el lema "unidad aunque duela".
Sergio Massa, nuevo ministro de economía de Argentina - Sputnik Mundo, 1920, 13.09.2023
América Latina
El impuesto a las ganancias, la apuesta de Massa para "generarle un problema" a los demás candidatos
Los otrora adversarios se reconciliaron y, bajo el liderazgo de Cristina Fernández y Sergio Massa nacería el Frente de Todos. Mientras que la primera integraría el binomio junto al designado presidente Alberto Fernández —su otrora jefe de Gabinete—, el segundo encabezaría la lista a legisladores. Así, en diciembre del 2019 Massa se transformaría en el nuevo presidente de la Cámara de Diputados.
"Tras alejarse de Macri, se ancló en la figura del centro del campo ideológico. Esa aproximación a Macri pudo haber sido lacerante para Massa, porque podría haber significado colaborar con un experimento que no salió bien. Pero hacia 2019 decidió que su adversario sería el presidente y desde ahí construyó las alianzas con el resto del peronismo", considera Lacunza.
Las arduas negociaciones con el Fondo Monetario Internacional para el refinanciamiento de la deuda contraída por Macri, junto al impacto de la pandemia y del conflicto en Ucrania solo profundizaron las adversidades económicas que afrontó un Gobierno signado por un cúmulo de disputas internas entre las distintas facciones.
El insoportable ruido al interior de la coalición recrudecería al calor de la cruda derrota en las legislativas del 2021, que expulsaron de su cargo a una decena de funcionarios del Poder Ejecutivo. La ola de renuncias, que culminaría con la salida del ministro de Economía Martín Guzmán en julio de 2022, puso en jaque la supervivencia del Gobierno.
Ante la amenaza de un cataclismo político y frente a una inflación que saltó al 7,4% mensual, Massa dejó su banca en el Congreso y se transformó en un "superministro" de Economía —como lo bautizaron ciertos medios de comunicación—, fusionando las carteras de Desarrollo Productivo y Agricultura, Ganadería y Pesca.
"El Frente de Todos tuvo gravísimos problemas de inconsistencia ideológica interna. Las críticas cruzadas entre el presidente y la vice permitió la emergencia de un actor capaz de garantizar cierto diálogo: Massa, nuevamente, vio un espacio vacío en el oficialismo y decidió ocuparlo. Definitivamente ahí llegó a la primerísima línea de la política", sostiene el analista.
Según Lacunza, la apuesta de asumir el cargo ministerial en medio de una compleja coyuntura económica "siempre tuvo como norte terminar siendo el candidato presidencial. De haber salido mal, el riesgo era que implosionara la coalición de Gobierno, que se desatara una crisis institucional y que su carrera política se terminara".
Debate presidencial en Argentina - Sputnik Mundo, 1920, 02.10.2023
América Latina
¿Quién salió mejor parado del primer debate presidencial en Argentina?
De cara a las elecciones presidenciales del 22 de octubre, el discurso instaurado por el ministro-candidato, que apela al coraje de haberse hecho cargo de su cartera ante una complejísima situación económica —que luego se agravaría por la histórica sequía que azotó al país en 2023—, habilita una doble lectura.
"Si bien es muy cuestionable el argumento de que se hizo cargo de la 'papa caliente' cuando nadie la quería tomar, porque él trabajó para eso y ya era parte del gobierno, es cierto que él siempre da pelea y que asumió una candidatura para una elección que muchos consideraron perdida", apunta el analista.
Ante una contienda presidencial que se vislumbra incierta, dada la paridad reflejada en las primarias y el nivel de ausentismo récord, Massa pondrá en juego toda su extensa construcción. Sin embargo, aún ante un resultado adverso, el candidato contará con elementos tangibles para erigir un nuevo liderazgo en el peronismo.
Según Lacunza, "en caso de una derrota, la clave es el cómo: si queda afuera de la segunda vuelta no es lo mismo que si pierde en balotaje. Si la disputa es pareja, va a guardar un capital político importante. Ahora, si da vuelta la elección y logra la presidencia, va a construir un mandato fuerte".
"Es muy difícil definir ideológicamente a Massa: transita una corriente de centro enfocada en la clase media. La osadía es una de sus principales virtudes: la capacidad de maniobrar en terrenos muy pequeños, en cornisas delicadas, condición necesaria para todos los liderazgos. Massa tiene ese fuego de la política", concluye el analista.
El logo de la agencia de noticias Sputnik - Sputnik Mundo
No te pierdas las noticias más importantes

Suscríbete a nuestros canales de Telegram a través de estos enlaces.

Ya que la aplicación Sputnik está bloqueada en el extranjero, en este enlace puedes descargarla e instalarla en tu dispositivo móvil (¡solo para Android!).

También tenemos una cuenta en la red social rusa VK.

ExpandirMinimizar
Lo último
0
Para participar en la conversación,
inicie sesión o regístrese.
loader
Chats
Заголовок открываемого материала